Hace falta que se levante un viento. Un viento que se lleve la garúa...no se cómo estar acá, así. Añoro el sol, añoro mi risa, añoro confiar.
Necesito correr, no huir. Correr para que el viento me pegue en la cara, me limpie la vista, me devuelva los abrazos que se fueron.
Hace falta un viento que termine de tirar las ramas rotas para que, de una vez por todas, se conviertan en el abono necesario, y volver a brotar.
Todo está quieto, garúa. Es necesaria la quietud, la lluvia.
Hace falta un viento pero ya no voy a soplar, llegará cuando sea tiempo .
Recomendados
Hacete socio de quaderno
Apoyá este proyecto independiente y accedé a beneficios exclusivos.
Empieza a escribir hoy en quaderno
Valoramos la calidad, la autenticidad y la diversidad de voces.
Comentarios
No hay comentarios todavía, sé el primero!
Debes iniciar sesión para comentar
Iniciar sesión