erosiones

Quiero, quiero ver tras, quiero ver tras de mi, quiero que los ecos me dejen de perseguir, de castigar, trato de ver tras esa pared, através de sus pliegues, veo como las líneas se cruzan, se esconden y se muestran, esos límites imaginarios que no paran de discutir sobre quien tiene el látigo que me azota, se doblan, ahora son círculos, se cortan y no sangran, murmullan ¿Por qué?, pues no quieren que sepa lo que traman, planean algo, algo siniestro, conmigo dentro, sus uñas van rasgando y abriéndo la unión de mis pieles que he hurtado por tanto tiempo, así que volteo y miro en lo que escondo y admiro como tal narciso, me rio, a carcajadas y duele, el corazón, siento a pasos galopantes como la sangre brota de mi cuerpo, buscando salida y yo me derrito sobre el piso, abrazándome, acariciándome, enamorándome, odiándome, el asco me inunda, me agota, me tortura, levanto mi mano y allí yace el látigo que me llena de amargura.