entre la esperanza y el olvido

No puedo dejar atrás todo lo que me carcome tan dentro de mi, todo lo que inhibe mi sentir, mi reaccionar.

Todo en general ya no es lo mismo. El sentir el transcurso de la vida no es lo mismo. Todo se vió reducido a la simple idea de volver algún día a sentir lo mismo y todo es tan remoto, tan poco probable, y tan poco sincero, que me siento incomprendida. Como si la vida solo se tratara de esto para mi y no merezca una segunda oportunidad.

Solo hay suciedad. No hay amor, no hay esperanza ni mucho menos una verdadera pasión. Quisiera dormir en sus brazos y sentir algo más, quisiera que se dé la casualidad (por favor). Al lado mío sólo siento su ausencia, sólo recuerdo el pasado. Y él tan calmo sobre las sabanas, suele dormir sin preocupación, no comprende a lo que se compromete.

Nadie entiende nada, y yo tampoco, no quiero entender, simplemente sentir, desbordar, alterar.

Solo deseo que sus brazos no claven espinas sobre mi cuerpo, ni que su pasado atormente mi futuro.

No quiero pretender, ni adelantar, ni exagerar, simplemente esperar lo mejor, o no.

De todas formas, sirvió de reflexión, de introspección.