Engaño

El engaño

Quizás fue mi culpa por no expresar cómo me hiciste sentir. Por no poder decidir si era mejor vivir contigo o sin ti. Por no gritar a los cielos el odio que llevaba por dentro. Quizás, de algún modo me gustaba odiarte.

Quise obligarme a pensar que yo era la única en tu corazón, pero los pensamientos de verte con otra, besando a alguien más, tocando a alguien más…Me estaban volviendo loca. Sabía que tus labios estaban siendo probados por otra persona, pero aun así ansiaba besarte. Sonreía mientras mi corazón se rompía con cada “te quiero” que decías. Mientras tu vivías tu doble vida perfecta, la mía se resquebrajaba en pedazos.

Quizás algún día sientas lo mismo que yo sentí y entonces te darás cuenta del dolor que soporté. Pero sé que ahora no lo comprendes, piensas que soy débil y una loca que no soporta los problemas que implican amar, pero cuando realmente ames a alguien, cuando ese sentimiento intenso recorra tu interior, solo entonces, conocerás el pesar de amar a alguien que quiere a alguien más.