Mis grandes maestros me obserban decepcionados, siempre me supieron inútil sin embargo veo consuelo en el hombre que un rato me desea.
Gran talento el de acomodarse, si lo que me marca lo vuelvo un hábito y el miedo me vence ¿entonces vas a tocar las astillas de mi por venir para poder disfrutar juntos ante mi miedo vencedor?
Ya oxidada te pregunto ¿para que la caricia?
Te vi en el ojo un relámpago decepcionado
El segundo día, ya con los pantalones cortos que habia soñado te ibas a poner
Esto es bastante parecido a la libertad condicional, podría decirle así y que el humor rose la roncha que casi explota
El escándalo inofensivo te ofendió.
Ya reconcomida te pregunte
¿Qué vas a contar de todo lo que estas viendo?
Te vi en la boca la náusea
¿Me viste?
Después de todo, me sincere para hacer de esto algo todavía más especial.
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