En otra vida.

Quizás en otra vida seguimos riendo a escondidas,

orgullosas de nuestras travesuras.

En otra vida no tuve miedo de sentir.

Supe valorar las risas, las lágrimas y los saltos de fe.

En esa otra vida puedo seguir mirándote a los ojos, quizás, con el sentimiento de paz en mi corazón. El deseo de hacerlo por más tiempo no me hace apartar la mirada.

Y en esa otra vida, ya conté cada uno de tus lunares, les he puesto nombres, seguramente. Proclamando que son igual de bellos que tú.

En otra vida puedo volver a sentir tus latidos contra mi mejilla, y tus brazos dándome calor. Arropando más allá de mi cuerpo, arrullando mis miedos, tristezas, las penas qué tantas veces no supe soltar en lágrimas.

En esa otra vida, ninguna de las dos sufrimos. No tendremos la necesidad de ser fuertes por la otra y nos permitimos ser sinceras, libres.

En esta no se pudo, ya no se podrá, por más que lo ruegue.

Así que solo espero tenerte a mi lado en esa otra vida, aunque solo seamos desconocidas, quizás solo transeúntes chocando hombros en alguna calle por París. Y conociendo mi suerte, nuestras miradas sentirán la profundidad de nuestras almas viejas, y aún así, nos disculparemos, y seguiremos hacia delante.

Pero me basta.

En otra vida, coincidimos, y perduramos.

En esta no.

En esta vida, la única, no podré mirarte a los ojos sin sentirme sucia, sin sentir que te traiciono a cada segundo que mi corazón susurra te amo.

En esta vida, no te tomaré la mano con la confianza de una niña, porque ya no lo somos. Somos conscientes.

En esta vida, la única, no me amas. No me quieres de la única forma que deseo ser querida. No me miras a los ojos con la misma dulzura burbujeante, ni me abrazas ya con sentimientos guardados.

En esta vida, vida mía, te soy.

Es de bobos hippies decir "en otra vida" sabiendo que solo vivimos en una, una vez. No hay otro momento, otra oportunidad, otro sueño, otro reencuentro. Es de cobardes no vivir esta vida pensando en las posibles oportunidades que tienes en otra. No hay. Entonces en otra vida no podré amarte, ni me amarás tampoco.

Pero yo soy una boba hippie. Lo soy, lo seré.

Y también soy cobarde. Lo soy, lo seré.