la congregación de mi exilio
casa de estrellas
lápida de miradas perdidas
estás acá pero ya no tengo nada tuyo
no ofrezco plegarias
te miro y te siento
ya estás acá
en tu muerte tardía
y en tu último suspiro del día
decae mi corazón en vos
te temo
estás en el cenit de mis miedos
en un apogeo de tu duro cristal de memoria
y yo lloro ya sin miedo
pero lloro por algo que no traes
le lloro a que cuando llegas
ya no me dejas ver nada
nada más que oscuridad
la claridad ya muerta
noche yo entro en tu peligro
sos una pupila perfecta hundida en vino
que me arranca mi órgano religioso
mi pensamiento emigrado
sabe tu nombre y te desconoce
volviste a ser enemiga mía
antagonista del día y del insomnio
de mi café desprotegido
en mi fuego de medianoche
Recomendados
Hacete socio de quaderno
Apoyá este proyecto independiente y accedé a beneficios exclusivos.
Empieza a escribir hoy en quaderno
Valoramos la calidad, la autenticidad y la diversidad de voces.
Comentarios
No hay comentarios todavía, sé el primero!
Debes iniciar sesión para comentar
Iniciar sesión