Ecos de un Sueño

Tus palabras solo se convirtieron en cicatrices por todo mi cuerpo,

marcas de un amor que prometía ser eterno,

pero se desvaneció como el humo en el viento.

Cada susurro que una vez me envolvió en dulzura,

ahora resuena como un eco de lo que pudo ser.

Recuerdos de risas compartidas y sueños tejidos,

se tornaron en sombras que acechan mis pensamientos.

A veces me pregunto si alguna vez fuiste real,

o solo una ilusión que me atrapó en su red.

Pero aquí estoy, reconstruyendo mi ser,

cada cicatriz es un recordatorio de mi fuerza,

de que puedo sanar y volver a brillar,

porque aunque tus palabras me hirieron,

el amor propio florece en la tierra de mi alma.

Y así sigo adelante, paso a paso,

dejando atrás las sombras y abrazando la luz.

Mis cicatrices son parte de mi historia,

pero no definen quién soy; soy más que el dolor.