Claro que juré que te amaría hasta la muerte, pero nunca dije que sería la mía. ¿Por qué pensaste eso? Yo no soy de los que aman con cartas ni flores, yo amo con la lengua entre tus labios, con las uñas marcándote la piel, con los suspiros que te arranco cuando ya no sabes si estás suplicando o disfrutando. No tienes que fingir porque se lo que sientes, lo noto cada vez que te alejas y terminas regresando. Tu cuerpo me llama antes que tu orgullo pueda detenerte. Y es que te ves tan jodidamente bonito cuando sufres un poquito por mí. No voy a soltarte, no ahora que ya aprendí cómo late tu corazón cuando me tienes cerca. Así que si alguna vez esto termina, será contigo gritando mi nombre. Porque no vine a amarte para verte con otro. Vine a destruirte suave, a quedarme en cada parte de ti. Porque si no eres mío, no vas a ser de nadie más. Y tú ya lo sabes… te encanta ser mío.
Recomendados
Hacete socio de quaderno
Apoyá este proyecto independiente y accedé a beneficios exclusivos.
Empieza a escribir hoy en quaderno
Valoramos la calidad, la autenticidad y la diversidad de voces.
Comentarios
No hay comentarios todavía, sé el primero!
Debes iniciar sesión para comentar
Iniciar sesión