Me siento estúpida. Porque estoy en un conflicto real entre lo que racionalmente creo que debería sentir… y lo que realmente estoy sintiendo.
Mi mente dice una cosa y mi sistema límbico me indica otra. Yo sabía que debía alejarme. Y sin embargo, una parte de mí quería que él insistiera más. Quería sentirme irrenunciable.
Quizás no esperaba un mensaje. Quizás solo esperaba una validación. Una señal que diga: "No te he olvidado. Todavía me importas." Pero esa señal no llega.
Y aunque yo decía que no quería verlo, hoy me descubro esperando que quiera verme.
¿Qué me pasa? ¿Por qué soy así? Quizá porque me hice ilusiones baratas. Porque llené los silencios con promesas que él nunca dijo explícitamente.
Tal vez jugó conmigo, tal vez fue ambiguo, manipulador o simplemente emocionalmente limitado.
Pero lo cierto es que fui yo quien proyectó deseo en alguien inconsistente.
No quería ser "la mala". Solo quería protegerme. Pero esta coraza no me está salvando. Me está aislando. Me está rompiendo desde adentro.
La raíz de mi dolor no es él. Es la sensación de haber sido descartada, ignorada, no elegida.
Y eso... eso duele más que cualquier despedida.
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