Te cuido de mí, de mi forma de querer, de darlo todo aunque no garantice nada y no lo pidas. Me cuido a mí de tus heridas y de eso que llevás guardado tan adentro y no podés decir(te) ¿O solo fui yo la que imaginó todo? estoy bien con eso también, todo fue raro de principio a fin.
Tu indecisión y la mía fueron la respuesta necesaria, todas las sombras que aparecen cuando uno ve un poco de luz.
Me acuerdo bien y no deberia, aunque tal vez haya sido todo una mentira eso que dijiste una vez de un roto para un descosido, porque dos personas heridas solo pueden morderse. Igual hoy te nombro como algo más que algo, fuiste más que eso, aunque tu boca nunca me haya nombrado y es justo, no hay lugar para el reclamo, lo sé cuando lo razono.
Ya no sé por qué te escribo entonces. Supongo que necesito sacarlo lo más rápido posible para no quedarme en circulos y seguir, quedaron cosas por decirte, pero no eran necesarias ¿te reirías, te asustarías si te digo que encontrarte fue una luz en el camino? ya no puedo saberlo, ya no debería querer decirlo, me moviste todos los esquemas, nunca estuve tan confundida en mi vida, suena ridículo y me tengo que reír.
Nunca me tragué nada, fuiste la excepción, esta vez lo hago con una sonrisa: ¿fue mutuo? ya no importa, importa lo que sí sentí porque lo que surge sin definir el modo, igual es.
Y sí fuiste, aunque yo no haya sido.
Recomendados
Hacete socio de quaderno
Apoyá este proyecto independiente y accedé a beneficios exclusivos.
Empieza a escribir hoy en quaderno
Valoramos la calidad, la autenticidad y la diversidad de voces.


Comentarios
No hay comentarios todavía, sé el primero!
Debes iniciar sesión para comentar
Iniciar sesión