Hoy pasé un ratito por lo de mi amigo Alejandro. Tan autista como yo. También se dedica a la filosofía y está tan en crisis como yo con la vida, con la academia y vaya a saber alguien con cuantas cosas más.
Después de charlar un rato fui a su biblioteca y me mostró unas compras: novela gráfica. Hasta ese momento para mí era todo lo mismo: historieta. Me corrigió: novela gráfica. Le dije: manga. No, responde, algunos mangas son novelas gráficas. Comenzó a explicarme con esa pasión autista que resulta insoportable para todos menos para quien explica. Me dijo: ¿leíste El Eternauta? Lo tengo, pero no lo leí. Léelo.
De golpe comenzó a invadirme un profundo interés por la novela gráfica, el manga, el comic y todo ese mundillo de gente rara. Llegué a mi casa y no pude dormir la media hora de siesta programada. Pasé el tiempo buscando en internet sobre el mundo este.
Me acaba de llegar por ML un ejemplar del más barato que encontré y no sé ni de qué se trata. Se llama Nana. Volumen 1.
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Comprar un cafecitoFernando Marasso
Licenciado en Filosofía por la Universidad Nacional de San Martín (UNSAM) y Profesor en Teología. Autista.
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