sentir tanto desgarra el alma.
puñaladas en el pecho,
hurgan, esparciendo el veneno,
obligándome a estar en mí lecho.
él se encuentra con la misma sustancia,
circulando por el torrente de cada entraña,
el antídoto que mí inmunidad desarrolló
no es suficiente para mantener lo que en mí habita del todo mitigado.
tampoco puede con lo que de momento está entrando.
¡necesito ayuda!
los niveles circulando en mí mente son muy altos
creo que no puedo controlarlos, la gente no entiende lo que pido
no quieren ayudarme...
¿o es que no comprenden lo que pasa?
¿de qué puedo culparlos?
también están envenenados, lo noto y las lágrimas brotan,
empapándome el rostro.
Mis lágrimas sirven solo para desagotar un poco,
duele agotar a otros
pero al verlas ni cuenta se dan.
Están cansados de que llore
de que intente explicarles algo...
no sé cuánto tiempo aguante,
¿así se siente vivir?
creí que con el paso de los años iba a mejorar, pero a medida que la gente crece
su alma se enfría y endurece.
No comprendo cómo la mía después de tanto, sigue caliente.
ardiendo mí pecho.
Tal vez esa alta temperatura es a la que mí cuerpo se acostumbró a trabajar,
para a los demás buscar entibiar, incluso cuando soy yo a la que tienen que ayudar.
es tan dañino para mí, yo me quemo, se me funde el pecho, siento que la cabeza me puede estallar.
comienzo a pensar muy mal, la tengo que golpear o no va a parar.
me odio tanto por sentir que los tengo que obligar.
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