Dejé de usar maquillaje y tengo un calzóncillo, dejé de pensar que todo es pecado, que todo merece castigo.
También de pensar que todo tiene nombre y apellido.
Dejo de ser inocente porque nunca lo fui, me gusta lo que me gusta, me gusta parecerme cada vez mas a mi.
Jamás me senti tan mujer como cuando me vestí sin querer parecer.
Sin corpiño, sin rubor, sin depilar, sin querer complacer (a nadie).
Ahora mis dedos son mágicos, mis caderas también.
Hay una "puta vibra" que jamás vas a entender.
Es secreta, entre nosotras, entre sus piernas quiero asfixiarme.
Si me ves te doy envidia, yo sé, yo sé....
Que me ves siendo tan libre que me intentas convencer.
No estoy hecha para tus manos, no estoy hecha para tus besos, no estoy hecha para tus fantasías, no estoy hecha para tus (fetichismos) o sueños.
Estoy hecha para una mujer, una mujer, como yo soy.
Una mujer es la que mueve todo lo que vos no.
No hay nada más que amor, devoción e inspiración cuando ella se decidió y en frente mio se desvistió.
Recomendados
Hacete socio de quaderno
Apoyá este proyecto independiente y accedé a beneficios exclusivos.
Empieza a escribir hoy en quaderno
Valoramos la calidad, la autenticidad y la diversidad de voces.
Comentarios
No hay comentarios todavía, sé el primero!
Debes iniciar sesión para comentar
Iniciar sesión