¿cuál es el precio de saberse una misma
si las llamas del dolor quieren ser apasiguadas
por objetos desconocidos que ensimisman
artilugios de restricción?
si lo que ebulle de este pecho
intenso movimiento del fuego
no sabe encontrar una bola de cristal
para ser exhibido en algún estante;
ni mucho menos ser empaquetado, envuelto
encintado y arrojado
a algún cajón bajo siete llaves.
¿cuál es el precio de saberse una misma,
reconocer el potente caudal que arrasa
descifrar de qué forma habitarlo
navegar a la afluente de los demás?
si en este caso ni el impulso del viento
ni la salada corriente oceánica
ni la iniciativa latiente del pecho
hacen las veces de torrente;
ni mucho menos los bailarines copos de nieve,
o la tierra que piso y reposo
logran limpiar los tajos
recuperar lo que se paralizó.
¿cuál es, entonces, el precio de saberse una misma?
¿qué más vender a este mundo que solo sabe temer?
¿cuánta fuerza
cuánta soledad
cuánto lugar
cuántos disfraces, ideas, caminos, personas?
¿cuánto cuesta,
cuánto cuerpo,
cuánto amor,
cuánto de mí?
Recomendados
Hacete socio de quaderno
Apoyá este proyecto independiente y accedé a beneficios exclusivos.
Empieza a escribir hoy en quaderno
Valoramos la calidad, la autenticidad y la diversidad de voces.
Comentarios
No hay comentarios todavía, sé el primero!
Debes iniciar sesión para comentar
Iniciar sesión