si me dieras cinco minutos más
antes de que dejemos de ser uno
antes de que dejes de ser parte de mi familia
y de mis noches
y de mi espalda abrazada con la fuerza de quien ama tanto que dejar ir haría que caigan poco a poco cada uno de sus huesos
si me dieras cinco minutos antes de que nosotros no seamos más nosotros
y nuestros encuentros sean para ver fantasmas bailando en parque rivadavia
para observar de lejos como solías tomar mi cintura para guiar mi paso
y dejabas el lado de la calle para vos por si algún día había un accidente
aunque siempre creí que morir juntos sería angelical
vos querías departamentos y lavandas
yo quería sangrar la poesía
y amaba más las drogas de lo que te amaba
pero si te sirve de consuelo, las amaba más de lo que me amaba a mí misma
entonces mis ojos rojos y mis pupilas dilatadas miraban a través del cariñoso cuidado de tus manos sobre mi rostro
y pensé que un día podría rescatarte y vos a mí
que podríamos ser, estar, morir juntos
por un camión o de vejez
por una sobredosis o un estrés postraumatico que no podamos sobrellevar
pensé que esta cama era tan gigante sin vos que se hacía cada vez más eterna y tuve que tirarla
como tirar tus ropas y todas las sábanas en las que respiré tu nombre
pero si me dieras cinco minutos antes de que dejemos de ser y seamos solo un cuerpo muerto y astillado
quizás podría juntar todas las palabras de amor de este país
y quemarlas lentamente frente a tus ojos
para que veas que movería todos los arenales de las playas de la costa
que iría en misión suicida a buscarte
que aunque ya no seamos y nunca más vayamos a ser
como me dijiste esa última vez que aguanté las ganas de besarte
porque dejaste de usar mi pulsera para usar la suya
y dejaste de mirarme con cariño para mirarme con cansancio
de mí, de la misma música de esa vida que solíamos tener
pero serán solo cinco minutos, te prometo que seré rápida
y que traeré todo lo que tenga que traer: te mostraré el mundo tal cual es a mis ojos
te pondré en el medio como una musa y vas a sonreír tonta y resentidamente
mientras fotografío los últimos cinco minutos
donde podremos llamarnos del otro
donde podremos reír sin llorar tanto esta despedida
donde abraces mi cintura por última vez
otra última vez
aunque esa quizás nunca la olvide
porque pasaste de mi cintura a mis deseos
y de mis deseos a mi amor
y de mi amor a mi cuerpo
y de mi cuerpo a esos últimos cinco minutos donde te dije te quiero, te quiero, te quiero.
y vos también, besaste mi mejilla solo por esa vez respondiendo que sentías lo mismo
pero ya no seremos y no somos
ni ayer ni hoy ni nunca
pero si tuviera el privilegio quisiera, sabés
esos cinco minutos para decirte que te odio con todo de mí
que si pudiera arrancarte de mí ya no estarías ahí
o acá
que te odio porque te dí mi juventud
porque te dejé entrar a mi cuerpo
porque tocaste mi corazón con tus manos frías y lo heriste
y nunca voy a perdonarte
que pudiste haber calentado tus dedos
antes de sostenerme
pero simplemente no querías
porque ya no me querías a mí.
así que concedeme cinco minutos para verte
para soltarte
para amarte
para odiarte
para deshacerte
y para desarmarme
y para entenderme
y para despedirme
Recomendados
Hacete socio de quaderno
Apoyá este proyecto independiente y accedé a beneficios exclusivos.
Empieza a escribir hoy en quaderno
Valoramos la calidad, la autenticidad y la diversidad de voces.
Comentarios
No hay comentarios todavía, sé el primero!
Debes iniciar sesión para comentar
Iniciar sesión