“No sé que pase en el futuro ni que será de nosotros, pero en todo caso quiero agradecerte por todo, por todos tus detallitos, por ser mi primera vez en esto del amor, por aceptarme hasta donde pudiste. Solo el tiempo sabrá lo que merecemos. Te amo."
Lo admito, te extraño.
Sé que te dije que estaría bien, que no te preocupases por mí.
Pero no lo estoy. Sé perfectamente que no.
Leíste muchas de mis cartas, pero esta quizá no te llegue nunca.
No es que estes en todos lados, es que mi vida se adhirió a tu presencia.
Me acostumbré. me acostumbré a verte por la mañana, a tus besos y a tu calor. Me acostumbré a tu ausencia, al igual que a tu indiferencia, pegada a mi alma como el olor de tu perfume en toda mi ropa.
¿Y cómo me quito el cuchillo, tan pegado a mi corazón, sin que duela? ¿Cómo me quito el anillo, la muestra de tu cariño, sin sentir su ausencia brillante en mi dedo? ¿Cómo hago, decime, para no sentir TU ausencia?
A pesar de todos los males, acá estoy yo, intentando sacar algo bueno de todo lo que me pasa. Esa era tu cosa favorita sobre mí. Que me aferro a esta computadora cual maquina de escribir, como una compañera nueva que conseguí para no pensarte.
Aun así, no triunfo en eso. No quiero que lo sepas. Ni, mucho menos, que te enteres sobre todas las preguntas que hago en mi cabeza desde que no estás.
¿Cómo entenderé, esos aspectos tan importantes de la vida, si no te pertenezco?
¿Cómo otra persona podría sentir tus labios, sin que yo muera de dolor?
Hay tantas cosas que muero por mostrarte.
Quizá debí besarte mas fuerte esa última vez, discuto con mi cabeza al no poder recordar con certeza cual fue nuestro ultimo beso.
Hoy estuviste en mis sueños, tal y como solías estar cuando nos conocimos. Pude sentir tu aroma de nuevo cuando te abrace, ese suave y varonil que se funde en mi como la ultima vez que te vi. Al parecer, mi mente lo recuerda muy bien.
Y en mi ilusión, te sostuve fuerte, aun sabiendo que no debía.
Pero en esta realidad decidí, aun cuando me dolía.
¿Qué será hoy de tu vida?
Y aunque al principio creí que sería un planteo ingenuo y egocéntrico necesito saber:
Dentro de esa mente tan analítica y de ese corazon tan fuerte y resistente. Alguna vez, dentro de mi niño, de esa parte de tu ternura que ya no me pertenece. Decime: ¿Me pensaste?
Sea cual sea la verdad, necesito seguir adelante.
A pesar de todo… te amo, ¿Eso no fue lo último que te dije?
Recomendados
Hacete socio de quaderno
Apoyá este proyecto independiente y accedé a beneficios exclusivos.
Empieza a escribir hoy en quaderno
Valoramos la calidad, la autenticidad y la diversidad de voces.


Comentarios
No hay comentarios todavía, sé el primero!
Debes iniciar sesión para comentar
Iniciar sesión