Caminito de Oregón.

¿Recuerdas hoy tus sueños de ayer?

Se vive siempre con ilusiones. Desde muy niño:

lo que traerán los Reyes Magos y lo mucho que disfrutaremos con ello; las vacaciones de verano y todo lo que entonces haremos; cumplir dieciocho y entonces... el carnet de conducir, un coche, trabajar y ganar dinero para...

El amor, la vida en pareja, los hijos...

Siempre hay un puente en perspectiva, un viaje a las Maldivas.

Va pasando la vida y esas cosas no sirven de mucho. Todo es postergar y esperar algo.

"¡Cuando me jubile!"

Vivir es hacer planes sobre la vida.

Luego, un día, cansado de tanto, te dices: Ya no quiero nada. Solo no querer, no esperar, no ilusionarme. Evitar las decepciones es quizás el mayor logro de vivir.

¿Qué, de lo soñado, se consiguió? ¿Qué, de lo conseguido, supuso algo?

Jugué mucho con aquella caravana del oeste americano. Cuatro caballos negros, un conductor con látigo. Roja con toldo blanco. Sí, me divertí mucho con ella. Fue una sorpresa; algo no soñado, deseado ni esperado. A mí esos supuestos Reyes Magos nunca me habían echado nada.

Es curiosa la vida.

Dolbach.