Hoy ardo de una manera distinta.
Hoy ya no arde nuestro amor,
ni mi cuerpo está encendido
como aquel sueño distendido
que decíamos tener ambos,
como el cielo que me prometiste
o las caricias en nuestras manos.
Hoy ya no ardemos.
Yo ardo.
Ardo de dolor,
de desesperanza,
de decepción.
Ardo sin ti,
y mis huesos duelen
si tus labios no quieren
hacerme reír.
Mi mirada hoy tiene un color distinto.
Ya no brilla dorada
como tus iris verdes
solía reflejarla,
ahora se torna ceniza que cae
sobre tierras lejanas,
tierras que conozco
porque un día fueron mi casa.
Mi piel ya no florece con tus caricias.
Ya no florece como lo hacía,
ahora es vana tierra,
estéril y marchita,
que lucha por mantenerse con vida.
Ya no da el fruto de tus caricias,
ni escucha a escondidas
el amor que te juraba
cada viernes de madrugada.
Ya lo dije,
lo sé,
pero hoy ardo de una manera distinta.

Blanca Bermúdez
Escribo para soltar lo que no sé decir en voz alta. No soy perfecta, pero cada poema es una parte real de mí. Gracias por leerme. Quédate. Comenta.
Recomendados
Hacete socio de quaderno
Apoyá este proyecto independiente y accedé a beneficios exclusivos.
Empieza a escribir hoy en quaderno
Valoramos la calidad, la autenticidad y la diversidad de voces.
Comentarios
No hay comentarios todavía, sé el primero!
Debes iniciar sesión para comentar
Iniciar sesión