Duele. Me quema por dentro lo que acabas de decir, como si tus palabras fueran brasas que se clavan sin piedad en lo más profundo de mi ser. No esperaba escuchar esto ahora, no después de todo lo que hemos pasado. Nos sentamos a hablar, buscando claridad, buscando una respuesta, y me sueltas esto, como si fuera lo más sencillo. Me dices que estuviste con alguien más y ni si quiera fue amor, alguien que ya sabías que me provocaba dudas. Culpa a un par de copas pero sabes que fuiste consciente, no te engañes, no ME engañes otra vez.
20 días cortamos. En ese tiempo, busqué respuestas en otro abrazo, me dejé llevar por alguien más, no para olvidarte, no para lastimarte, sino porque necesitaba entender lo que sentía, lo que quedaba de todo esto. Pero ahora, al escuchar esto, al saber lo que hiciste, me doy cuenta de que ese vacío que intentaba llenar era mucho más profundo de lo que imaginaba, porque lo llenaste de mentiras, de secretos que nunca me dijiste.
Me duele. Porque mientras yo intentaba mantenernos firmes, mientras me enfrentaba a tus reproches, a tus críticas, a esa incomodidad por verme con alguien más, tú te callaste. Guardaste lo que para ti no parecía importante, pero para mí, lo es todo. No solo me engañaste, sino que lo hiciste con alguien que sabía que me inquietaba, alguien que se aprovechó de algo que en su momento te advertí, y sin embargo, tú lo esquivaste. Y ahora, no sé qué hacer con todo esto.
Pero a pesar de todo, quiero seguir. Quiero seguir adelante contigo. Quiero que este tiempo que nos dimos, este tiempo separado, sea algo más que un paréntesis, que no se quede en un simple respiro para los dos, sino que realmente nos ayude a sanar. No quiero que lo que hicimos durante este tiempo —lo que hice yo— sea solo una excusa para minimizar lo que tú hiciste. No quiero que lo que tú ocultaste se convierta en algo que yo deba cargar sin más.
Si vamos a seguir, quiero que sea real. Que no queden secretos, que no haya más verdades a medias. Porque lo que más necesito ahora es que te comprometas a reconstruir lo que tú rompiste. Y sé que será difícil, que dolerá, pero lo nuestro merece ese esfuerzo, merece esa oportunidad. Pero también sé que no puedo hacerlo sola.
Duele. Duele pensar en lo que fue, en lo que soñamos, y en cómo lo tiraste, pisoteaste y quemaste. Me consume el saber que todo esto se enreda más con cada palabra que dices. Pero aquí estoy, dispuesta a intentarlo. Si tú también lo estás. Necesito que demuestres que este tiempo que nos damos no es solo un respiro para evitar el dolor, sino una oportunidad para sanarnos de lo que rompimos. Porque si vamos a seguir, tiene que ser con todo: con verdad, con compromiso, con amor sincero...

Lala
Mi nombre es Lala. Me encanta sumergirme en las palabras, porque ahí es donde realmente me encuentro. Escribo sobre el amor, el desamor y todo lo que pasa en medio
Recomendados
Hacete socio de quaderno
Apoyá este proyecto independiente y accedé a beneficios exclusivos.
Empieza a escribir hoy en quaderno
Valoramos la calidad, la autenticidad y la diversidad de voces.
Comentarios
No hay comentarios todavía, sé el primero!
Debes iniciar sesión para comentar
Iniciar sesión