I. Somos dos átomos nacidos del mismo polvo y nos acercamos a través de la oscuridad con respiraciones temblorosas y nuestros huesos en colisión. Luego cuentas las constelaciones de mis huesos y yo beso el sol de tu pecho. Eres el primero en arder y cuando lo haces, resplandeces con orgullo. Cuando mueres, el universo está de luto. Espero tu regreso pero nunca sucede. A veces una vida no es suficiente.
II. Me doy cuenta de que esto es una historia en primera persona. Nací. Fui hecho. Existo. Muero. Todo por ti. Estoy empezando a olvidar el comienzo y me rindo por un final. Tú eres el sol, y yo estoy en medio de la sombra, esperando a ser cegado. La vida es circular. Yo nací en este momento -- Y así vivo, amo, muero.
III. Ya no creo en los dioses. Creo en ti y en mí, sosteniendo la respiración para después tener un momento de claridad atemporal en donde nuestras almas se reconocen y se encienden juntos. Somos lo que somos. Siempre. A veces una vida es todo lo que necesitamos.
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