Éramos risa en tardes calladas, sombras que jugaban sin decir nada. Fuiste mi calma, mi confidente, y yo, fui solo una más entre la gente.
Guardé en silencio lo que dolía, te amé en secreto cada día.Te hablaba riendo, con voz serena, mientras por dentro moría de pena.
Tus ojos buscaban otras miradas, y yo fingía no estar quebrada. Te escuchaba hablar de otros amores,como quien riega sus propias flores.
Soñaba con ser la única historia, que guardaras tú en tu memoria. Pero solo fui tu fiel amiga, la que te abraza cuando te lástimaba la vida.
Y ahora me ves sin detenerte, y yo aún muero por no tenerte. Te amé sin ruido, sin ser buscada y es como vivir siendo olvidada.
Nunca fui tuya, y lo entendí tarde, cuando mi alma ya no pudo salvarse. Y me quedé sola, rota en la herida, amando a un fantasma que aún respira.
Recomendados
Hacete socio de quaderno
Apoyá este proyecto independiente y accedé a beneficios exclusivos.
Empieza a escribir hoy en quaderno
Valoramos la calidad, la autenticidad y la diversidad de voces.
Comentarios
No hay comentarios todavía, sé el primero!
Debes iniciar sesión para comentar
Iniciar sesión