CARTA DE DESALOJO

Mi querido señor:

Después de idas y venidas, de cuestionamientos y dudas, estoy en condiciones de afirmar que hemos llegado a un punto sin retorno. Supongo que usted, atento a esta situación, ya tiene casi listo su equipaje. Sí, mi querido señor, esto no es otra cosa que una carta de desalojo.

Creo que hemos recorrido todas las instancias: mantuvimos eternas conversaciones, establecimos normas de convivencias y hasta concurrimos a una mediación, y siento que todo esto sólo ha logrado sacar lo peor de cada uno de nosotros. Podríamos echarnos culpas, o decir que la sociedad nos ha fagocitado con su egoísmo y mediocridad, pero, si me lo permite, estimo que el tiempo de las culpas también ha terminado.

En algún momento cambiamos de rumbo, dejamos de coincidir; y no se trata ya de rever derechos y obligaciones, es tiempo de cuestionar principios, los suyos y los míos, que sospecho, a estas alturas están en polos opuestos.

Su error fue sentirse propietario de este lugar y el mío fue permitírselo, y ahora siento que apenas usted es una visita, una visita molesta. Se ha tomado atribuciones que no le corresponden; ha tratado de reformarlo todo: primero fueron sutiles cambios en la fachada para, después, ocuparse del interior queriendo hacer de este espacio algo útil a sus necesidades.

Mi querido señor, ya no puedo permitirle que arrase con lo que me llevó tantos años edificar; día tras día busqué los colores, los detalles que hicieran de este lugar mi refugio. Es evidente que usted ya no está a gusto aquí, por eso creo que lo mejor es que se vaya. No intente arreglar nada, sus manos han traído este caos, no creo que ahora puedan solucionarlo. Una vez más me haré cargo de todo, es posible que se noten grietas o parches pero tengo la tranquilidad de que los cimientos están intactos.

Mi querido señor, lo estoy desalojando de mi vida; entendamos, usted y yo, que a veces el amor no es todo y creo que esta es una de esas veces.

Cuídese mucho y no nos olvidemos nunca de los buenos tiempos que nos hemos regalado.