A veces.

A veces te cruzo accidentalmente en mis lugares.
Y a veces, solo a veces, me encuentro también cruzando los tuyos,
esperando que aparezcas, esperando volver a tenerte un rato conmigo.

A veces no te espero a vos pero, con ilusión, espero la idea de contarte:
"Linda, escuché esa canción —de ese álbum que me recuerda a vos".
"Vi esa película —esa que pensé en recomendarte—, donde nos vi reflejadas, donde eras la otra mitad de mí, incluso siendo personajes ficticios."

A veces me pregunto si, sin querer, también te encontrás curioseando aquellos lugares que eran —son— nuestros.
Me pregunto si al igual que yo, seguís viéndolos así.
O si, simplemente, aprendiste a verlos sin pensar en mí.
Si de verdad te resultó tan sencillo arrancar de vos lo que los hacía nuestros.

Aunque, egoístamente, espero que no.
Espero que, en mí, encuentres el mismo dolor que yo en vos.
Que mi recuerdo te pese tanto como el tuyo pesa en mi alma.

A veces te cruzo en mis lugares.
Y otras veces, me cruzo a mí misma, buscándote ahí.