a primera vista.

quererte fue algo tan sencillo como respirar. quererte no me fue difícil, ni siquiera complicado y tampoco fue algo que pudiera manejar. 

 quererte, para mi, fue y es algo que no me costó hacerlo porque lo hice desde el primer momento en el que tímidamente chocamos en esta vida. dicen por ahí que los ojos son el reflejo del alma y la primera vez que los tuyos me vieron pude notar un poquito de tristeza, una pena que encendió las alarmas para dar aviso de que esos ojos iban a ser mi perdición. sí, quererte después de haber cruzado mirada con esos ojos fue la cosa más sencilla del universo porque constantemente me miraban con timidez y desafío al mismo tiempo, fueron las luces que iluminaron mi oscura habitación donde había permanecido demasiado tiempo. 

quererte a vos despertó un huracán de sentimientos positivos en mi alma, haciendo que poco a poco sanaran heridas de las que ni siquiera fuiste autor. cosiste mis heridas con besos y reemplazaste las piezas que me faltaban con caricias. y si me permitís ser un poco más cursi, te digo que hiciste florecer margaritas en mis cicatrices porque tu amor me curó, porque tu amor me dió vida. 

gracias a vos creo en el querer a primera vista, a primera conversación, gracias a vos creo que querer a alguien es la cosa más maravillosa del universo, querer-te en todos los sentidos y aspectos, querer-te es como elijo vivir. 

y quererte, amor mío, también significa amarte.