61 Años
Pasan los años,
En horas sin orden.
Ayer era un adulto,
Hoy soy un niño,
Y mañana solo un hombre.
A veces soy muchos pedazos en una botella,
Que se revuelven y mezclan,
Rodando por un camino de decisiones,
Hechas por mi,
Hechas por otros.
Hechas por Dios y por el hombre.
A veces siento como el tiempo,
Me agarra del cuello,
Y con cada cumpleaños que pasa,
Sin ninguna sutileza,
Me agarra con mas fuerza.
A veces mi imaginación,
Se burla de mi mortal existencia,
Con aspiraciones y sueños de un pasado imperturbable,
Se ríe de mi,
Del desagradable pensamiento,
De un futuro incierto,
Con fecha de vencimiento.
A veces miro al espejo,
Y quedo perplejo,
Al ver cómo el peso de mi conciencia,
Me ha acortado en centímetros,
Como todos los rostros,
Que he mostrado en mi vida,
Han tallado en mi cara,
Distintivas arrugas,
Hechas de despreocupadas sonrisas,
Y devastadoras agruras.
A veces paso el día contando,
Todo lo que no tengo,
Todo lo que tenía,
Y todo lo que yo quiero,
A veces inevitablemente lo comparo,
Con lo que otros tenían,
Con lo que tienen,
Y con lo que quieren,
Para sentirme más grande,
O tal vez más pequeño,
Qué patético pensar que los días en que lo hago,
Ocupan tanto espacio en el calendario.
Pero a veces,
A veces despierto en la mañana,
Y no soy nada más que yo mismo,
Mi mente no divaga a ningún lado,
Ni al futuro,
Ni al pasado.
No miro el reloj ni un solo momento,
Cuando me encuentro con mi reflejo, no sufro ni me lamento,
Me alegro de tan bonito reencuentro.
Pienso en todo lo que he dejado atrás,
En todo lo que he construido,
Las personas que han ido y venido,
Entonces fluyen lentamente emociones sin nombre,
Apoderándose de mis sentidos,
Solo escucho mis latidos,
Que reconfortan el alma,
Y me llenan de calma.
De repente este día,
Que no es ni corto ni largo,
Al que no le falta nada ni le sobra algo,
Se vuelve un recuerdo preciado,
De todo lo que he logrado.
Así que señor tiempo,
Esta vez te agarrare yo del cuello!,
Te ahorcare con mis dos manos,
Exprimiré de ti cada segundo y cada momento.
Pues la víspera de mis 61 años,
Será una de esas veces,
De regocijo ignorante,
Pues qué brillante,
Es el arte de estar vivo.
Recomendados
Hacete socio de quaderno
Apoyá este proyecto independiente y accedé a beneficios exclusivos.
Empieza a escribir hoy en quaderno
Valoramos la calidad, la autenticidad y la diversidad de voces.
Comentarios
No hay comentarios todavía, sé el primero!
Debes iniciar sesión para comentar
Iniciar sesión