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¿Se imaginan el color azul cuando la noche no está demasiado oscura? el mejor de todos, el más romántico, el más clásico para querer evocar. Anoche sentía mi cuerpo refrescándose; a veces, cuando empiezo a descansar después de mucho tiempo bajo estrés, siento como si el cortisol fuera bajando y dando lugar a otras sustancias, tengo adentro mío la sensación de que algunas partes son recorridas con agua fría. Me refiero a agua refrescante, quizá es una sensación parecida a la serotonina pero en vez de sentirla en la cabeza, detrás de los ojos, o en la lengua, como me pasa con algunas drogas, la siento en el torzo, quizá en el sistema digestivo, soy muy sensible a lo que como, y sí, es mi segundo cerebro.

Bueno, anoche, un poco en ese estado funcionando como canal amable de mí hacia mí, tuve la visión de un cielo ovalado, de ese azul, arriba mio. Ovalado como un recorte, como un oval estirado en el Paint, sencillo y azul, un azul un poco líquido. La realidad, es que ese diálogo imaginisita conmigo misma es lo que soy. Hace varios meses abrazando a alguien vi claramente un sol, de amanecer a ocaso, formando un arco en su trayecto. Soy eso y fragmentos, de conexión y pérdida de conexión.

Todos los días, últimamente no todos, pero periódicamente, escribo en un diario. Ahí hablo a mi performance normal, es mi canal a tierra, cuento lo que hice, algun sentimiento de manera veloz y con alguna resolución para el momento, lo que voy a hacer, o lo q tengo q hacer. Causas y consecuencias. Normales. El control para no perder la memoria. Me es muy útil y lo escribo a mano.

Ahora escribo evocando la duermevela, el trance de escribir, que ese espacio liminar donde la información se traduce más abstracta. Quiero continuar ahí ahora. Después en el diario. Y que ambas escrituras trabajen para la otra.
Voy, igualmente, a coleccionar distintas voces en este quaderno, imagino.

Eso es todo por ahora
Gracias por leer,

Em.