Escribo porque la realidad adormece y adolece, y alguien tiene que decir que no siempre las cosas son lo que parecen.
Escribo porque escribiendo encuentro mil maneras de sentirme feliz y vivo.
Escribo porque las sesiones con un psicólogo no son costeables, por el momento, y además me parece más sano y divertido encontrar algo de mí en lo que escribo.
Escribo por las cosas que me lastimaron y dolieron, porque de alguna forma tenía que transformar el dolor en amor y al amor en algo mejor.
Escribo porque me sale natural hacerlo.
Escribo porque me sale del alma.
Escribo porque estudio letras. Y si, era obvio, después de leer tanto, algo de eso en mi tenía que brotar.
Escribo para aquellas personas que leen esto, buscando en las palabras algún consuelo. Yo sueño con ser eso.
Escribo para vos, que seguís dudando que de tu vida sea lo mejor, sabiendo bien que nunca vas a encontrar a nadie como yo.
. Escribo porque soy un anticuado romántico, quizás desdichado en muchas ocasiones, queriendo poner en letras mis confusas emociones.
Escribo para que me lean. De lo contrario, sería como pintar un cuadro y luego esconderlo en una pieza.
Escribo porque soñaba con ser artista y no tengo ningún aparente talento. Si, con lo que hago soy un inconformista. Malo en los deportes, malo en el amor, malo en los estudios. Aunque como dicen, ni lo malo es tan malo, ni lo bueno tan bueno.
Escribo porque con mi palabra estoy comprometido.
Escribo porque a mis catorce, casi de casualidad, aunque creo que esas cosas no existen, me encontré con unos poemas de Pablo Neruda. Desde ese momento, seguramente sin saberlo ya mi destino estaba marcado.
Escribo para que el día que a mi lado no te tenga, pueda volver a vos y a nosotros.
Escribo porque… ¿Eso querías no? Alguien que te escriba, bueno me presento, soy ese alguien.
Escribo porque sin quererlo a veces soy eso que escribo.
Escribo porque las cosas en su momento estaban mal (siguen estando mal) y no encontraba refugio en nada ni nadie. Hoy elijo creer que las cosas cambiaron, aunque a veces la melancolía golpea fuerte la puerta y yo con mi libreta me escondo bajo la mesa.
Escribo porque soy un ser emocional, pero eso en mi vida no puedo permitirlo, así que elegí la mejor manera para que esa emocionalidad no me afecte en lo absoluto.
Y bueno si, también escribo para que el día que quieras volver y tengas preguntas que no pueda responder, sepas que fuiste mi inspiración y que todo lo hice pensando en vos. Esta es la manera en la que amo y en la que demuestro amor.
Y ademas la razón y media por la que escribo, son por esas cosas que jamás he contado pero que si he vivido. Puedo recuperar todo, menos lo no vivido.
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